San Luis terminó su miserable performance en el Ascenso 2024, recibiendo la peor goleada histórica en campeonatos de ascenso frente al sublider del campeonato, Magallanes.
De la peor manera terminó la era Bozán al mando de San Luis de Quillota. El 7-1 ante el "manojito de claveles" fue demasiado castigo para un grupo de jóvenes que salieron a defender la camiseta con la permanencia ya asegurada. Juan Araya puso la cara y como lo hizo desde que llegó, anotó el gol del honor con una hermosa jugada personal. Además del debút de algunos jugadores de proyección, fue lo único rescatable de los quillotanos ayer en San Bernardo.
San Luis no se encontró táctica ni esquemáticamente en cancha, mostrando todo lo malo de la temporada. La expulsión temprana de Caballero condicionó a un equipo que perdió referencia en ataque y que no pudo reordenar sus piezas con un jugador menos. Parecía que varios querían tomar sus maletas y empezar sus vacaciones. Magallanes aprovecho todas las debilidades del canario, con un juego práctico, velóz y de elaboración directa, nockeó tempranamente a la improvisada defensa canaria y supo llevar sin problemas el partido. Una goleada más para este equipo que nunca mostró personalidad ni encontró a los jugadores para sacarlo del mal momento, dando gracias al momento de Barnechea que evito que cuadro Quillotano peleara el descenso.
Con el pitazo final se pone fin a la era de la gerencia argentina y de Bozán-Almendra en San Luis. Según supo soycanario.cl la distancia del cuerpo técnico con los experimentados terminó siendo total en las últimas fechas, demostrando el ácido clima al interior del camarín de los quillotanos.
De ahora en más, viene el proceso de término de año, donde las despedidas, finiquitos y continuidades se revisarán caso a caso por la nueva gerencia técnica. En las próximas semanas se debiera oficializar la venta del club y la estructura que comenzará a tomar posesión en San Luis de Quillota.
El grupo argentino se despide de Quillota como una de las historias más negras en los casi 105 años de historia del cuadro canario, donde la lucha por la permanencia, la llegada de jugadores extranjeros sin condiciones ni ganas para jugar profesionalmente, técnicos con inexistente experiencia ni logros fueron la tónica en estos casi 6 años de gestión.
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